5 pasos para cuidar tu utensilios de hierro fundido
El menaje de hierro fundido, es una herramienta hecha de un material que puede soportar altas temperaturas, estar expuesta directamente al fuego, tanto en exterior como interior, y sobre cualquier tipo de superficies, golpes, caídas y maltratos.
Este noble material, entrega fuerza y rudeza para que al momento de cocinar, podamos dejar fluir nuestra creatividad sin impedimentos.
Ahora.. esto no quiere decir que no necesite cuidado. ¿Cómo hacerlo correctamente? , en Casa en Orden te dejamos 5 tips para cuidar tus utensilios de hierro forjado como un profesional:
Ya tienes tu utensilio de hierro fundido, por esto aquí te compartimos 5 pasos para que el mantenimiento y limpieza de tu utensilio sea mucho más sencilla de lo que has creído.
- LAVAR CON AGUA Y JABÓN
Cuando termines de utilizar tu utensilio de hierro fundido deja que se enfrie un poco hasta que lo puedas manipular, es decir hasta que este tibio.
Te recomendamos que lo laves con agua tibia y un jabón suave, si utilizas quita grasa lo que harás será debilitar o quitar completamente la capa de curado. Utiliza una esponja suave, a menos que le estés haciendo una restauración, no utilices esponjas metálicas o abrasivas.
Si tienes restos de alimentos muy pegados, te recomendamos que antes de lavar, agregues sal y le hagas un masaje con la esponja seca a tu utensilio, cómo si estuvieras exfoliando, esto ayudará a quitar esos restos de comida sin dañar la capa de curado.
- SECA CON UN PAÑO Y LLEVA A LA ESTUFA
Una vez termines del lavado, si tu utensilio es con acabado esmaltado puedes dejarlo secar al aire libre, aunque puedes seguir los siguientes pasos para conseguir la capa de anti adherencia más pronto.
Seca muy bien tu utensilio con un paño de cocina, busca paños o toallas que no dejen residuos o pelusas en la superficie.
Lleva a la estufa a fuego medio por uno o dos minutos, esto con el fin de evaporar toda la humedad que haya podido quedar en el utensilio.
- APLICA UN POCO DE ACEITE EN TODA LA SUPERFICIE
En un paño limpio aplica un poco de aceite, puede ser aceite de girasol, canola, linaza u otro de origen vegetal, no recomendamos el uso de aceite de oliva pues este tiende a dejar una capa pegajosa en el utensilio.
Con el paño esparce por todo la superficie el aceite, creando una capa muy delgada y uniforme. El paño te ayudará a evitar que queden espacios de tu utensilio con «charcos» de aceite que pueden crear capas gruesas de aceite quemado.
- LLEVA NUEVAMENTE A LA ESTUFA
Vas a llevar tu utensilio a la estufa, a una temperatura medio alta, hasta que veas un poco de humo blanco. Esto puede tomar entre 5 a 7 minutos normalmente.
Este proceso nos ayudará a construir una capa de antiadherencia y a cuidar el utensilio con acabado curado de la oxidación.
5. DEJA ENFRÍAR Y GUARDA
Así es, eso es todo, solo queda esperar que este totalmente frio y guardar.
Muchas personas en este momento aplican nuevamente aceite con un paño, una capa mucho más delgada, sobre todo donde se cocinan los alimentos. No te preocupes, esto no va a atraer bichos a tu cocina, lo que logra es ayudar con el cuidado y prevenir la oxidación.
Te dejamos igualmente un vídeo en donde puedes ver este paso a paso, aquí.